jueves, 3 de abril de 2014

Reina de la noche cubana


Cucu Diamantes decidió cambiar su vida hace 20 años y con dolor en el alma opta por consolidarse como una cantante de éxito fuera de su país.

Después de mucho tiempo decide regresar a Cuba para realizar una gira nacional después de ser nómada por ciudades de Estados Unidos (principalmente en Nueva York) y de Europa (en especial en Roma y París), y se convierte en una de las pocas intérpretes cubano-americanas en hacer una gira en los últimos 50 años.

La brillante Amor crónico, segundo largometraje firmado en solitario por el polifacético artista Jorge Perugorría tras su película Se vende, es una amalgama perfecta de muchos elementos, que logran unirse sin estorbarse entre sí.

Porque Amor crónico es tanto un documental como una pieza de ficción, pues Cucu sí existe (fue nominada al premio Grammy Latino por su álbum Cuculand) y de verdad hace ese recorrido por su patria estimada, pero a la par Perugorría echa mano de la ficción para hacer énfasis en una serie de homenajes que se permite ofrecer con solvencia, ingenio y coherencia.

Amor crónico, además, es una divertida comedia de situación (con tintes de humor negro) y un melodrama sincero y emotivo sobre cómo los creadores a veces no son profetas en su propia tierra y cómo para triunfar deben en ocasiones sufrir grandes sacrificios.

Sin olvidar que su estructura de road movie le permite a Perugorría brindar un retrato costumbrista e hilarante sobre el interior cubano, por lo que nos acerca a ciudades como Bayamo, Santiago, Santa Clara, Matanza, Cienfuegos y Camagüey, entre otros puntos, mostrando el alma de un pueblo siempre lleno de música, humor, necesidades, contradicciones, y sobre todo, de talentos.

Jorge Perugorría, que se hizo famoso gracias a su actuación en el clásico moderno Fresa y chocolate (1993), cuenta su historia en un tono enloquecedor, tierno, desenfrenado, surrealista y con mucho esperpento, que haría las delicias tanto del director italiano Federico Fellini, como del cineasta ibérico Pedro Almodóvar y del dramaturgo español Ramón María del Valle Inclán.

Esta producción, que ya se presentó en los festivales internacionales de cine de Southwest (Estados Unidos) y el de Buenos Aires (Argentina), es de igual forma un homenaje al cine cubano en lo particular y al séptimo arte en general, así como al musical de los años 1940 y 1950 de Hollywood y a los ritmos tropicales.

Perugorría hace también guiños y muestras de admiración a reconocidos creadores de la isla como a los realizadores Juan Carlos Tabío y Tomás Gutiérrez Alea, a los actores Mirta Ibarra y Vladimir Cruz, a músicos como Alexander Abreu, Juan Formel, Los Van Van, Los Muñequitos de Matanza y la bloguera Wendy Guerra, entre otros tantos.

El final, tan abierto, tan engañoso, tan variado, tan para todos los gustos, es la cereza a un pastel realmente delicioso.

Amor crónico integra la oferta del Festival Internacional de Cine de Panamá, y se proyectará el 4 de abril, a las 5:00 p.m., en el Teatro Nacional, y el 5 de abril, a las 9:30 p.m., en el Parque Quinto Centenario.

Fuente: www.prensa.com
DANIEL DOMÍNGUEZ Z. CINE COMPARTIDO